miércoles, 13 de agosto de 2014

DATO CURIOSO

La inauguración de este camposanto está marcada por una anécdota

 Algo macabra tal vez, pero anécdota al fin y al cabo. "El primer entierro que iba a llevarse a cabo en el Presbítero Maestro debía ser el del arzobispo español Juan Domingo Gonzales de la Reguera. Un día antes, mientras realizaba los trabajos finales para la inauguración, un pintor llamado Francisco Acosta tuvo un accidente y murió en el cementerio. Él debió ser enterrado ahí, pero las autoridades decidieron esconder el cuerpo hasta que se enterrara el del Arzobispo. Una vez realizado el primer sepelio, ya se pudo dar cristiana sepultura a Acosta" cuenta el historiador José Bocanegra, responsable de las visitas nocturnas que la Beneficencia realiza al cementerio el último jueves de cada mes.


No hay comentarios:

Publicar un comentario